Hace poco disfrutá mucho leyendo «Parí­s no se acaba nunca». Ahora estoy disfrutando con «Parí­s era una fiesta» y sospecho que le debo mucho a Enrique Vila-Matas, porque en general Hemingway me aburre soberanamente. Me estoy llevando una gratí­sima sorpresa.


¿Aún no has tenido bastante?

Deja aquí tu email y te mando más cosas.


Deja un comentario

Ver una entrada aleatoria

Archivos: